Durante años en Venezuela han gobernado personajes de los cuales siempre hemos tenido que decir, su desempeño al frente del país, la corrupción y demás.
¿Qué sucederá con los venezolanos y los presidentes que hemos elegido?
Es realmente hipotética la frase "los presidentes que hemos elegidos", nunca sabremos que cantidad de veces han sido manipulado los resultados electorales, lo que si estamos seguro es que lo han hecho con grotesca intención y sin la mayor preocupación que el pueblo se de cuenta de la estafa, algunos consientes "apoyadores" y otros que sencillamente de manos atadas y sobretodo en los últimos tiempos.
¿Cómo un hombre puede manejar el destino de 26 millones de seres humanos sin que se pueda hacer algo a tiempo?
Quizás yo tenga una idea de porque estamos como estamos y por que hemos permitido tantos abusos y manipulaciones.
El Venezolano por naturaleza es dicharachero, despreocupado y poco interesado en los asuntos políticos hasta que llego el presidente actual, votamos para elegir un hombre que prometía lo que siempre habíamos esperado, que los venezolanos fuéramos prioridad en Miraflores, pero no paso mucho tiempo para mostrar sus verdaderas intenciones y el poco interés en cumplir sus promesas.
A muchos de nosotros nunca nos interesó el ámbito político, pero hoy día haríamos los posible por habernos preparado para ocupar la presidencia. El único requisito que estoy seguro se necesita para ser presidente de Venezuela, es querer a su tierra y su gente, que lamentablemente ninguno de los últimos mandatarios ha tenido el suficiente sentimiento nacional para que su pueblo lo pueda apreciar desinteresadamente y con la verdad de frente.
Deberíamos ser mas responsables, tener mas cuidado con la puntualidad, ser sinceros, ver la mentira como delito y velar por que se castigue con cárcel, importarnos mas la "evolución" como nación que una "revolución", que no aporta nada positivo para los venezolanos. Pensar más en el bienestar de nuestras familias que en el trago, las fiestas y los paseos.
Para poder disfrutar de todas esas cosas que nos encantan, deberíamos primero preocuparnos por tener una nación dónde exista un sistema judicial que se encargue de hacer cumplir la leyes y sirva de contralor a cualquier persona que este al frente del país y se le ocurra defraudarnos haciendo honor a sus profesiones no simpatizando con postura política alguna y realizando su trabajo con altura, pero lamentablemente, esa no es nuestra realidad actual. Las riendas del país deberían ser llevadas por un ciudadano que realmente quiera realizar esas metas, por que por si solos los venezolanos, por nuestra condición no lo vamos a lograr, si un presidente VENEZOLANO dictara reglamentos tal vez difíciles de asimilar al principio, pero con futuro prometedor y al tiempo diera a conocer sus intenciones con acciones inmediatas favoreciendo al pueblo, estoy seguro que aceptaremos las buenas nuevas, pero solo pedir sacrificios extremos al pueblo, aprovechando su nobleza y el resultado sea que los gobernantes y su gente disfruten de la riquezas del país, no es ni justo, ni decente.
En fin, si no hay en nuestra juventud venezolana quien este analizando con seriedad y disposición la realidad que estamos viviendo, no quiero saber que podrá ser de nuestra tierra en unos años, es posible que entre ellos exista ese presidente, que sin arsenal bélico, ni lenguaje soez y con mucha actitud y aptitud logre encaminar nuestro país a una verdadera "evolución".
¿Qué sucederá con los venezolanos y los presidentes que hemos elegido?
Es realmente hipotética la frase "los presidentes que hemos elegidos", nunca sabremos que cantidad de veces han sido manipulado los resultados electorales, lo que si estamos seguro es que lo han hecho con grotesca intención y sin la mayor preocupación que el pueblo se de cuenta de la estafa, algunos consientes "apoyadores" y otros que sencillamente de manos atadas y sobretodo en los últimos tiempos.
¿Cómo un hombre puede manejar el destino de 26 millones de seres humanos sin que se pueda hacer algo a tiempo?
Quizás yo tenga una idea de porque estamos como estamos y por que hemos permitido tantos abusos y manipulaciones.
El Venezolano por naturaleza es dicharachero, despreocupado y poco interesado en los asuntos políticos hasta que llego el presidente actual, votamos para elegir un hombre que prometía lo que siempre habíamos esperado, que los venezolanos fuéramos prioridad en Miraflores, pero no paso mucho tiempo para mostrar sus verdaderas intenciones y el poco interés en cumplir sus promesas.
A muchos de nosotros nunca nos interesó el ámbito político, pero hoy día haríamos los posible por habernos preparado para ocupar la presidencia. El único requisito que estoy seguro se necesita para ser presidente de Venezuela, es querer a su tierra y su gente, que lamentablemente ninguno de los últimos mandatarios ha tenido el suficiente sentimiento nacional para que su pueblo lo pueda apreciar desinteresadamente y con la verdad de frente.
Deberíamos ser mas responsables, tener mas cuidado con la puntualidad, ser sinceros, ver la mentira como delito y velar por que se castigue con cárcel, importarnos mas la "evolución" como nación que una "revolución", que no aporta nada positivo para los venezolanos. Pensar más en el bienestar de nuestras familias que en el trago, las fiestas y los paseos.
Para poder disfrutar de todas esas cosas que nos encantan, deberíamos primero preocuparnos por tener una nación dónde exista un sistema judicial que se encargue de hacer cumplir la leyes y sirva de contralor a cualquier persona que este al frente del país y se le ocurra defraudarnos haciendo honor a sus profesiones no simpatizando con postura política alguna y realizando su trabajo con altura, pero lamentablemente, esa no es nuestra realidad actual. Las riendas del país deberían ser llevadas por un ciudadano que realmente quiera realizar esas metas, por que por si solos los venezolanos, por nuestra condición no lo vamos a lograr, si un presidente VENEZOLANO dictara reglamentos tal vez difíciles de asimilar al principio, pero con futuro prometedor y al tiempo diera a conocer sus intenciones con acciones inmediatas favoreciendo al pueblo, estoy seguro que aceptaremos las buenas nuevas, pero solo pedir sacrificios extremos al pueblo, aprovechando su nobleza y el resultado sea que los gobernantes y su gente disfruten de la riquezas del país, no es ni justo, ni decente.
En fin, si no hay en nuestra juventud venezolana quien este analizando con seriedad y disposición la realidad que estamos viviendo, no quiero saber que podrá ser de nuestra tierra en unos años, es posible que entre ellos exista ese presidente, que sin arsenal bélico, ni lenguaje soez y con mucha actitud y aptitud logre encaminar nuestro país a una verdadera "evolución".